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Escasez de antibióticos y medicamentos antivirales

A nivel nacional, hemos experimentado múltiples carencias desde el inicio de la pandemia, incluidos los medicamentos comúnmente utilizados para enfermedades pediátricas, lo que ha causado una disponibilidad limitada.

Los siguientes medicamentos son escasos en algunas partes del país:

  • Tamiflu: medicamento antiviral que se usa para tratar la influenza.
  • Amoxicilina: antibiótico que se usa para tratar infecciones bacterianas (comúnmente recetado para tratar a niños con infecciones del oído, faringitis estreptocócica e infecciones torácicas).
  • También puede ser más difícil encontrar medicamentos comunes de venta libre, como el paracetamol (que se encuentra en Tylenol) y el ibuprofeno (que se encuentra en Advil y Motrin).

En Children's Mercy, estamos realizando esfuerzos de conservación al prescribir dosis de acuerdo con la práctica basada en evidencia.

Consejos para el tratamiento en el hogar


Los niños pueden tratarse con paracetamol o ibuprofeno para la fiebre, la cual es la respuesta natural del cuerpo a una enfermedad o infección. No se conoce que la fiebre ponga en peligro a un niño generalmente sano.

  • El ibuprofeno se puede administrar a niños de 6 meses de edad y mayores.
  • El paracetamol se puede administrar a bebés más pequeños, pero si un niño tiene menos de 3 meses de edad y tiene fiebre, póngase en contacto con el médico de cabecera del niño antes de usar paracetamol.
  • Elija el medicamento al que el niño responde mejor y no lo cambie. No alterne entre paracetamol e ibuprofeno.
  • Lleve un registro de cuándo administra el medicamento, para que la siguiente dosis no se administre demasiado pronto. Esto también ayudará a conservar el suministro.
  • No es seguro darle a su hijo un medicamento para adultos en una dosis más baja ya que puede ser difícil asegurarse de que se administre la dosis correcta.
  • Consulte los siguientes enlaces para las dosificaciones adecuadas para los niños.

Cuándo contactar al médico


Los padres deben comunicarse con el médico de cabecera del niño debido a la fiebre si:

  • El niño es menor de 3 meses de edad.
  • El niño no parece mejorar con el tratamiento en el hogar.
  • El niño no puede tolerar líquidos o presenta signos de deshidratación, como disminución de la orina en los pañales o boca seca.
  • El niño actúa como enfermo, incluso si no presenta fiebre.
  • El niño tiene dolor de cabeza, dolor de garganta o dolor de oído graves.
  • El niño no está actuando como normalmente lo hace.